Para este año me parece que al PRI se le presenta la oportunidad que había estado buscando desde el 2000, ya que con un PAN con desafortunadas declaraciones y malos gobiernos y un PRD dividido Ia gente no ve con malos ojos el volver a lo conocido.
Me parece que el trabajo de pre-campaña por parte de Beatriz Paredes ha sido fundamental ya que con decisiones inteligentes supo ocultar las divisiones internas del partido y le ha dado una estructura fuerte al partido.
Sin embargo, la elección de candidatos a alcaldes y diputados dentro del partido ha estado dejando mal parado al partido ya que dedazaos e influencias fueron los que en la mayoría de los casos determinaron estos puestos dejando a la militancia muy molesta y decepcionada. Municipios y distritos de la zona metropolitana son ejemplos que reflejan está situación, donde la mano de Peña Nieto se ve por todos lados ya que gente allegada ha sido l que se ha quedado con los puestos de representación popular, dejando de lado el voto de los priístas.
Ante estas situaciones el PRI debe ser muy cuidadoso ya que todo candidato que llegue con un partido dividido a sus espaldas está condenado a perder las elecciones.
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